CANICROSS DE MARCHAMALO (y marchará mejor)

A pesar de las gélidas temperaturas que reinaban este domingo en todo el territorio nacional, los tres representantes más valientes del VAMOYAPAYA se calzaron sus zapatillas de cross para dar lo mejor. La carrera de Adrían se retrasó una hora al tener que esperar al último corredor de la carrera anterior que hizo su entrada en meta con todos los junior ya colocados bajo el arco de salida. Este retraso a una temperatura de -2º hizo mellas entre los corredores jóvenes, pero también los perros se resintieron de la larga espera. Por fin se escuchó el silbato de salida y se acabó la tensión. Algunos perros salieron ya despistados y al pasar por la zona del público Yeicob, como buen perro de rastreo que es, localizó a nuestro fotógrafo entre la muchedumbre, se paró en seco y corrió hacia atrás en su búsqueda. Momentos de tensión invadieron a Adrián, ya que Yeicob no quería seguir corriendo. Hizo varios intentos para que continuase la carrera, pero no hubo manera y finalmente abandonó. Una lástima ya que era uno de los favoritos en su categoría. ¡Ánimo, la próxima vez encerraremos al fotógrafo en el coche con las ventanillas cerradas!
Después del pequeño percance sufrido llegó la carrera popular y como bien dice el nombre aquí corre todo lo que tenga cuatro patas. Esta vez Yeicob demostró que lo suyo es correr por el campo y Estrella le seguía lo más rápido posible olvidando el intenso frío. Muy inoportuno en el km 1,5 se paró a plantar un pino en un sembrado que les hizo perder un par de puestos. Poco a poco fueron remontando de nuevo para cruzar la meta entre los primeros y colocarse una bonita medalla de recuerdo.

P.D.: El que piense que el canicross es un deporte fácil, está confundido. Aquí no sólo prima la velocidad de los dos miembros del equipo, sino también la afinidad y comunicación entre ellos que con un animal no es cosa fácil.