Antes del concierto
Jaime, el etíope ganador, el cuñado del etíope, el hermano del primo del embajador de Etiopía y Manolón que venía la concierto.
Los Vamoyapaya desembarcamos en las costas africanas de la Ciudad Universitaria y lo primero que hicimos, fue buscar a alguien que hablara nuestro idioma para poder comunicarnos y realizar el calentamiento previo a la carrera. Entre otros nos encontramos con Martillito de Triana y el maratoniano Abel Antón, optamos por el segundo por aquello de que todos los caminos llevan a Soria.
Después de un buen rato intercambiando opiniones con el gran Abel y algún que otro chascarrillo, nos agolpamos en la salida unos 500 corredores (1.300 según el del megáfono) e inciciamos un descenso pronunciado a ritmos infernales y más abajo y más. Pero llegó un momento, en eso del km 3,5 que no podíamos continuar descendiendo, aún sin barómetro intuía que estabamos por debajo del nivel del mar. Entonces empezó el ascenso, que digo, la madre de todos los ascensos, desde abajo del campús hasta la punta más alta, con deciros que hay un observatorio astrológico en este punto. Hasta ayer no sabía que la Ciudad Universitaria se había construido sobre una montaña, y no digo monte, Montaña. Incluso según ascendíamos, notábamos el cambio de clima producido por la altura. Arrastrándonos por cada curva, dábamos por sentado que la cuesta se acababa. Pero al girar comprobabamos que continuaba "saludamos a algunos montañeros".
Por fin en el kilómetro 5, como si se tratara del alto del Anglilú, coronamos. El avituallamiento estaba 200 mts más abajo (bien pensado), pues de haber estado en la cota, nos tendrían que haber puesto la botella en la mano.
Empezamos el descenso, con las piernas agarrotadas, con pasos cortos para controlar la pendiente y bajamos y bajamos y por fin último repecho (que nos podían haber perdonado) y entramos a meta. Algunas de las primeras palabras de los corredores, tras cruzar el arco de llegada(- La madre que la pario) (- Joder que cuesta) (-Esta puntua para el cirduito de montaña) Algunos, directamente abrieron el caldo, que daban en las mesas de llegada y se lo enchufaron para recuperarse.
Individualmente en el comando Vamoyapaya hubo de todo. Santi y Estrella hicieron una carrera muy controlada y regular, Estrella marcó tiempo personal y Santi llegó, que no es poco. Adri y Jaime pasaron por el Km 5 , a 24 m y Adri tuvo que retirarse por un ataque asmático, Jaime realizó los últimos 5 km en 16 m. Total 40 minutos., primer clasificado junior y su merecida copa. Javi hizo mejor marca personal y se cagó en la cuesta más de 50 veces.
Una vez que recogimos trofeos y saludamos a las autoridades, iniciamos el regreso a nuestra tierra. Estuvo bien el viaje a Africa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario